A partir del mes de septiembre, todos los autónomos, pequeños negocios y empresas españolas que contraten a una persona mayor de 45 años disfrutará de bonificaciones en las cotizaciones a la seguridad social. La nueva norma ha reducido el límite de edad para poder acogerse a esos incentivos, de los 50 a los 45 años, que constituyen el 50% de los parados.
El nuevo sistema de descuentos para la contratación (Real Decreto 1/2023, de 10 de enero), entrará en vigor el 6 de septiembre y en él se baja el límite para emplear trabajadores seniors de larga duración, que pasa de los 50 años a los 45. Se podrán beneficiar de estas reducciones en las cotizaciones a la Seguridad Social, autónomos, pequeños negocios y empresas españolas que contraten a personas de este perfil. La bonificación será de 128 euros al mes, por lo que se ahorrarán 1.536 euros anuales a la hora de abonar las cuotas de estos trabajadores.
De las 2.677.874 personas que estaban censadas como paradas el pasado mes de julio, 1.537.489 eran mayores de 45 años, lo que representa más del 50% de los parados.
Pero esta nueva normativa tiene exigencias, y es que los trabajadores por cuenta propia y las empresas que contraten a estos trabajadores y se ajusten a ellas, tendrán que firmar contratos indefinidos, a tiempo completo y con una duración mínima de tres años.
Hay una serie de condicionantes. Si no se cumplen los requisitos, habría que devolver esa bonificación, con los intereses generados hasta la fecha, además de sufrir una posible inspección de trabajo. Por otro lado, no se podría volver a pedir una nueva bonificación durante un tiempo con relación a ese mismo trabajador, aunque si se podría para el resto de plantilla. Si se podrá despedir, siempre y cuando sea procedente o tenga causa. Si se produce un despido procedente o el propio trabajador no supera el periodo de prueba, no se estaría obligado a devolver la bonificación.